Llega la temporada de las castañas asadas, de los boniatos y las calabazas, de los guisos con carne de caza, las mandarinas, los higos y los dulces de membrillo. El otoño aterriza en nuestras cocinas con un abanico de sabores que la convierten en una de las estaciones más deliciosas del año.
En AGRO nos vamos al mercado para presentaros los alimentos que no pueden faltar en la despensa en estos meses de octubre y noviembre. Frutas, verduras, hortalizas, carnes… El clima mediterráneo nos surte de exquisitos manjares para disfrutar, una estación más, de los frutos que nos regala la tierra, el mar y la montaña.
Setas
Son saciantes, energéticas y bajas en calorías; ayudan a fortalecer los huesos y tienen un alto contenido en fibra insoluble, potencian nuestras defensas y son recomendables para personas que padecen de diabetes… Vamos, un superalimento que en otoño podemos encontrar tanto en el mercado como en el campo (¡mucho ojo con las que recolectamos!). Se pueden preparar de mil y una formas: en crema, al horno, al ajillo, en revuelto con patatas y huevo, lasañas, con garbanzos, en risoto.
Carne de caza
El otoño es sinónimo de carne de caza, para algunos los bocados más suculentos del año. Liebre, perdiz, conejo, faisán, corzo, gamo, ciervo o jabalí. La fórmulas culinarias en torno a esta materia prima suelen ser sencillas, buscando por encima de todo ensalzar el producto. Guarniciones básicas con patatas, cebolla y zanahoria y alguna salsa o aderezo para conseguir un toque final diferente.
Membrillo
Una especie de versión ‘frutal’ del doctor Jeckyl y Mr. Hyde: increíble la transformación de este alimentos, que pasa de ser una fruta de sabor ácido y áspero, poco jugosa y astringente en crudo a un producto dulce y delicado cuando se pasa por los fogones. La carne de membrillo es probablemente su versión más conocida pero está igualmente delicioso si simplemente se asa o se cuece, para degustar en solitario o como acompañamiento de carnes.
Berenjenas
Una hortaliza con carácter y un sabor muy peculiar que es protagonista de un plato muy conocido en el recetario malagueño, las berenjenas con miel. A la hora de prepararla hay propuestas para todos los gustos, desde quienes apuestan por rellenarlas de carne y gratinarlas al horno a los que prefieren tomarlas a la plancha y maridarlas con salmorejo, por ejemplo. Es otro de los superalimentos de la temporada, rica en agua y fuente importante de fibra, potasio, fósforo, calcio, magnesio, hierro y vitamina C, entre otros.
Mandarinas
Para muchos la fruta estrella de esta temporada, el tentempié saludable perfecto: fáciles de tomar, con muchos nutrientes, ligeras y de sabor incomparable. Pelarlas y comerlas al momento es la mejor forma de aprovechar su alto porcentaje en vitamina C, minerales y fibra, pero también se puede aprovechar para preparar dulces y pasteles o incluso para segundos platos, poniendo la nota ácida, como base de algunas salsas, en carnes y pescados.
Castañas
No hay olor más característico del otoño que el de las castañas asadas. Son la señal inequívoca de que arranca la nueva temporada. Se las disfruta tanto asadas, comiéndolas en el típico cartucho que compramos en los puestos de la calle, como cocidas, confitadas, en salsa para acompañamiento de carnes y pescados, como base de sopas calientes y en postres, en mousse, tartas y pudding. Y no solo están riquísimas de cualquier manera, sino que además se trata de un fruto muy nutritivo. Ricas en hidratos de carbono, son una excelente fuente de energía y tienen un gran poder sacian. Las vitaminas y minerales que la componen hacen el resto para convertir la castaña en un alimento 10.
Batatas
Otro de los olores y sabores propios del temporada, el de la batata asada. Bajo contenido calórico, altamente nutritivo y con un sabor dulce sacia para tanto como guarnición, en postre o para tomar de merienda, combinado con unas lonchas de queso fresco. La batata se consume mucho asada al horno pero protagoniza además propuestas culinarias tan apetecibles como una crema de otoño de calabaza y batata o lasaña de calabaza, batata y piñones, se cocina en tortilla o bien en tarta.
Granadas
Las granadas son uno de los alimentos indispensables y característicos que nos regala esta estación del año. Es característica tanto por su forma –el zumo lo llevan en unas pepitas (las semillas)– como por su sabor peculiar y se la valora especialmente por ser rica en antioxidantes, con nutrientes que ejercen un efecto beneficioso en el corazón. ¿Cómo sacarles todo el jugo? En crudo, comiéndonos las pepitas (mucha gente las desgranada con una cuchara o un tenedor), o en zumo, exprimiéndoles estas. Combinan muy bien en ensaladas, con yogurt o mousse de queso y tanto con su pulpa como con las semillas se prepararan deliciosas mermeladas.