Los alimentos tienen múltiples propiedades que nos aportan los nutrientes necesarios y el mantenimiento de nuestras funciones fisiológicas en el día a día. Pues bien, dentro de ellos hay algunos que nos ayudarán mucho a mantener una piel sana, muy ideal ahora para lucirla en la playa y en la piscina, y que tenemos que incluir en nuestra dieta: son los que se llaman los productos dermosaludables, una serie de alimentos que son muy ricos en proteínas, fibra y vitaminas antioxidantes.
En este sentido, la dieta mediterránea ofrece un amplio abanico de posibilidades en cuanto a productos dermosaludables, entre ellos el pescado fresco y el marisco, que contribuyen enormemente a frenar la oxidación de las células y por tanto a conservar la salud en nuestra piel. El salmón, el atún, el bacalao o la sardina son algunos de los que no pueden faltar a lo largo de tu semana en los platos, y de hecho que mejor este verano que tomarse un rico espeto de sardinas, rico en ácidos grasos Omega 3, al que pocos se pueden resistir o acompañar tus ensaladas con atún o salmón para darle un toque especial. También la carnes, como puede ser el pavo y el pollo, nos ayudan al mantenimiento de nuestro tejido celular.
Los frutos secos también nos ayudan bastante a mantener una epidermis muy saludable y uno de los destacados son las nueces, por su riqueza en vitaminas así como sus ácidos grasos Omega 3 y vitamina E, al igual que ocurre con las frutas frescas, como pueden ser la fresa, el kiwi, la sandía o el melón, por sus propiedades antioxidantes. Bien para consumirlos como postres en las comidas o como deliciosos y sabrosos zumos, la fruta es una de las indispensables en estos meses de verano.
Las verduras y hortalizas también nos ayudan en nuestra dieta dermosaludable, y de hecho uno de los reyes son los tomates, que nos ayudan a proteger nuestra piel gracias a la riqueza en antioxidantes que poseen. Así que este verano no pueden faltar en tu mesa, y qué mejor que prepararlos a modo de un rico y refrescante gazpacho en una porra antequerana o como elemento esencial en una ensalada. También las lechugas, los espárragos, las zanahorias o las espinacas son los indispensables a la hora de regenerar nuestras células y que también nos ayudan a mantener una piel bronceada gracias a la vitamina A. Las legumbres son un grupo de alimentos que, entre otras propiedades cuentan con fibra, vitaminas y proteínas que también contribuyen a este fin, como pueden ser las lentejas o los garbanzos.
Y por supuesto, es muy importante el agua, ya que nuestro cuerpo está compuesto de alrededor de un 65 por ciento de líquido y nos ayuda a mantener una piel hidratada. Es conveniente tomar al día alrededor de dos litros o algunas bebidas refrescantes como pueden ser los zumos de frutas naturales dentro de nuestro plan de una dieta equilibrada, y sobre todo prestar más atención a su consumo en verano a la hora de combatir las altas temperaturas, especialmente si estamos expuestos al sol, disfrutando de algunas horas en la playa o en la piscina o haciendo ejercicio al aire libre.