Más allá de ser unas grandes protagonistas en los postres, así como en desayunos y meriendas, en numerosas preparaciones culinarias y en nuestro recetario, las frutas se están convirtiendo en un importante ingrediente en nuestros platos, que no solamente le dan vistosidad, sino que también enriquecen nuestras creaciones. Y, además, debido a su aporte de vitaminas y minerales se convierten en uno de los alimentos imprescindibles en nuestra dieta mediterránea.
Muchas de estas frutas nos sirven para preparar diversas bebidas refrescantes y sabrosas que se hacen ideales sobre todo cuando aprieta el calor, así como mermeladas y helados para endulzarnos el paladar. Pero también para carnes, pescados o ensaladas tienen su cabida.
Las frutas permiten usarse como base para salsas y acompañamientos, en compotas, para alimentos salados y como guarnición de consistentes recetas de carne o de pescado. Como nos explican desde Grupo Gallego, a la hora de cocinar con fruta, uno de los productos que mejor combina con ellas son las carnes de caza, aunque su uso ha sido extendido a todo tipo de materias primas, incluido el pescado. “Hemos de tener en cuenta que todas las frutas que se usan en recetas de carne o pescado han de ser o bien frescas o bien secas, como las pasas. Las envasadas o en almíbar no serían muy recomendables, ya que aportan demasiado dulce a la elaboración en este segundo caso”.
Entre algunos de los platos y combinaciones más resaltables, la piña, las ciruelas pasas o el melocotón casan muy bien con el pollo, las frutas rojas y las manzanas lo hacen con el cerdo y el limón con la ternera. La naranja y la pera van en perfecta combinación con el pato, con el pavo y con el cordero. Las frutas también pueden llegar a ser ingredientes principales: un pastel de espinacas y manzana con beicon crujiente o brochetas de piña con champiñones.
Además, las ensaladas tanto frescas como templadas se prestan a incluir diferentes frutas, como los frutos rojos, manzanas, peras caramelizadas, piña y un larguísimo etcétera que pueden incorporarse a las ensaladas de verduras o de pasta.
En estas fechas de cambio de estación, algunas de las frutas más demandadas y que pueden servirnos para nuestros pinitos culinarios son el melocotón, el melón, la nectarina, la pera, la manzana, la uva, el higo, la granada, el membrillo o el mango, y pronto llegarán los caquis y las chirimoyas. Y, en lo que se refiere a nuevas tendencias, los higos están arrasando, así como la fruta del dragón (pitaya).
A la hora de cocinar con frutas debemos pensar como cuando lo hacemos con verduras, hay que usar las que estén de temporada, sólo así obtendremos todo su potencial gastronómico y sus nutrientes. La variedad tampoco debe faltar, así que manos a la obra y bien provecho.