La Costa del Sol espera superar este verano, desde junio a septiembre, los 7,3 millones de viajeros, lo que supone un incremento del 3,2 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior. Unas perspectivas que se traducen en unos 150.000 viajeros más.
Así lo ha indicado en rueda de prensa el presidente de Turismo Costa del Sol en funciones, Francisco Salado, quien ha comparecido junto al director general de la empresa pública, Arturo Bernal, y el consejero delegado de la misma, Jacobo Florido.
Salado ha destacado las «excelentes» previsiones para el periodo estival, que llevarán a «volver a asistir al mejor verano turístico de la historia, con crecimientos en casi todas las variables de la actividad turística y la confirmación definitiva de la recuperación del mercado nacional».
Con los incrementos previstos, en el sector turístico se superarán los 136.000 empleados, un 21 por ciento del total de los ocupados de la provincia, lo que denota, ha dicho Salado, «la importancia del sector turístico para la provincia», con una oferta sólida y que mantiene su liderazgo pese al resurgimiento de destinos competidores como Turquía, Túnez o Egipto.
Respecto a las pernoctaciones, el director general de Turismo Costa del Sol, Arturo Bernal, ha indicado que se prevén similares al verano pasado, igual que en ingresos turísticos, cuando ascendieron a unos 7.300 millones de euros. No obstante, ha puntualizado que «es pronto» para concretar estas variables, dado que son previsiones realizadas sobre las llegadas cerradas hasta el mes de octubre a través del aeropuerto de Málaga-Costa del Sol.
El máximo responsable de Turismo Costa del Sol ha incidido en que están haciendo «bien» el trabajo de diversificación de la oferta turística y en la apuesta por la calidad y no por la cantidad de viajeros, reiterando que el destino malagueño no puede competir en precios con los otros, pero sí ha subrayado la calidad existente en la provincia.
Salado ha señalado que en los últimos cinco años se han producido incrementos significativos en las llegadas de viajeros procedentes de Dinamarca, Suecia, Italia, Holanda y Finlandia, con un aumento del 70 por ciento. Le siguen, con entre un 30 y 70 por ciento más de llegadas, los procedentes de Francia, Bélgica, Suiza, España e Irlanda; mientras que Reino Unido, Alemania y Noruega crecieron entre un diez y un 30 por ciento.
Salado ha indicado que Reino Unido «sigue incrementando» sus llegadas al destino Málaga-Cosa del Sol: «Ese peligro al ‘Brexit’ sigue controlado porque siguen viniendo a la Costa del Sol».
Respecto a las plazas aéreas previstas, ha indicado que la Costa del Sol «gana competitividad» en Irlanza, Suecia, Noruega, Holanda, Belgica, Francia y Alemania, manteniéndose Suiza y Reino Unido y descenderá, según las previsiones actuales, Dinamarca e Italia, un ocho y cinco por ciento respectivamente.
«Desde abril a septiembre somos el aeropuerto que más llegadas recibe de Estocolmo y Copenhague; el segundo que más recibe desde Dublín y el tercero desde ámsterdam», ha especificado, incidiendo en que se han comparado con otros destinos como Barcelona, Baleares, Niza o Santorini, entre otros.
El también presidente de la Diputación en funciones ha hecho hincapié en que la actividad turística «volverá a crear riqueza y empleo en verano» en la provincia de Málaga, lo cual evidencia, en su opinión, que se continúa trabajando «en la línea correcta», recordando los avances del destino Costa del Sol en big data, inteligencia artificial, digitalización, marketing, etcétera.