Unas 500 personas participarán como voluntarios este sábado en el anillamiento de pollos de flamenco en la Laguna de Fuente la Piedra, en Málaga; una reserva natural en la que unas 377.000 parejas de esta especie han nidificado desde que se tienen registros en 1984.
Así lo han informado este martes en rueda de prensa el delegado de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Fernando Fernández Tapia-Ruano, junto al director conservador de la laguna, Manuel Rendón, quienes han destacado que la previsión es anillar unos 600 pollos.
Desde 1984 han nacido unos 213.600 pollos en la laguna, siendo 2013 el año en el que más nacieron, un total de 20.471, ha asegurado Fernández, quien ha indicado que desde que empezó el anillamiento en 1996 hasta la fecha se han identificado 18.978 pollos; un proceso que, ha dicho, da una información que «nos va a determinar la evolución, la edad, la mortandad y otros parámetros valiosos».
Ha explicado que «el éxito de que se produzca mayor nidificación o no dependerá de la lluvia caída», apuntando, al respecto, que «podemos decir que ha sido un buen año hidrológico, porque aunque no ha llovido en la primera parte, sí hubo importante lluvias en octubre, lo que ha supuesto que haya gran cantidad de agua en la laguna y que casi 9.000 parejas hayan nidificado este año» en ella.
Esto se debe traducir en «una cantidad importante de nacimientos», aunque se está en estos momentos en la fase de análisis de fotografías aéreas realizadas con dron para saber cuántos han nacido», ha señalado Rendón, apuntando que esperan saber esta cifra el mismo día del anillamiento.
Rendón ha explicado que son 500 los inscritos para participar en este acto, los cuales primero durante la madrugada llevarán a cabo la fase de captura de los pollos, para luego dividirse en seis equipos que tendrán que identificar a los flamencos con dos anillas, una de PVC y otra de metal, «siempre de una manera cuidadosa para evitar daños a los pollos».
El delegado ha recordado que se cumplen 35 años de que la laguna fuera declarada reserva integral y está amparada por varias figuras de protección, indicando que Andalucía es «una de las primeras comunidades españolas en tener una legislación específica en protección del patrimonio natural».
