Solo estamos empezando
Los datos son fríos pero reveladores: las empresas agroalimentarias de las cinco comarcas de la provincia de Málaga crecieron un 11 por ciento durante el pasado año 2015. Al menos así se desprende del último informe hecho público por la Fundación Madeca.
Sí, estamos ante una industria clave y primordial en Andalucía, que supone el 8 por ciento de su producto interior bruto y de la que dependen 250.000 puestos de trabajo, por no hablar de las exportaciones, que ya en el último mes de julio habían alcanzado un 74 por ciento de lo exportado durante el ejercicio anterior.
Este es sólo el comienzo. El futuro se augura prometedor. Las posibilidades agroalimentarias de la provincia de Málaga y de Andalucía son ilimitadas, gracias especialmente a las condiciones del clima y la orografía que permiten el desarrollo de cultivos y de actividades ganaderas y vinícolas de calidad, únicas en el mundo.
Y si este es el principio de una industria con un gran porvernir, que lleva años cimentando su solidez, no digamos ya de este periódico magazine, que el pasado mes de diciembre cumplió con las expectativas e ilusión que se habían generado en el sector y tuvo una enorme acogida entre los productores agroalimentarios de la provincia de Málaga y fuera de ella, ya que además de su versión papel, Agro cuenta desde hace unas semanas con su versión digital, un espacio de actualidad que se hace eco de los movimientos y acciones de esta industria.
Este número está centrado, en su primera parte, en el aceite de oliva, donde España es el principal productor, comercializador y exportador de aceite de oliva en el mundo, mientras que el olivo es el primer cultivo de Andalucía.
La producción de aceite de oliva extra se ha recuperado en la provincia de Málaga a buen ritmo y producirá, en la campaña que ahora termina, un 24 por ciento más que en la anterior.
Y donde se habla de datos no hay que olvidar nunca el esfuerzo, el de todos esos agricultores que se dedican al olivo, a la recogida de la aceituna en los campos de la provincia, las manos que hacen posible luego el oro líquido, la aceituna de mesa. Nuestro homenaje en esta fotografía que ilustra hoy el editorial de nuestro periódico
Pero además de la agroalimentación, donde también hacemos hincapié en los subtropicales y en las propiedades de la stevia, este segundo número deja un amplio espacio al turismo, con visita al pueblo de Casabermeja, una ruta senderista del Robledal al Pico Tejeda, y reportajes de oleoturismo y enoturismo, entre otros.
Nuestra apuesta por la agroalimentación y el turismo es total. Si en el primer número estuvimos presentes en la Feria Sabor a Málaga de la Malagueta, en este lo estaremos en la Feria Internacional de Turismo de Madrid y en Madrid Fusión, una semana después. Y sólo estamos empezando.