Las casas rurales de Málaga alcanzan ya picos de ocupación que superan el 86 por ciento en agosto, según Ruralidays.com, web especializa en gestión de este tipo de alojamientos en Andalucía, que destaca que las reservas en estos casos se hacen «con mucha antelación». En julio, el pico se encuentra por encima del 78 por ciento de ocupación.
Así, según han indicado en lo que respecta a las reservas, en agosto se sitúa en una media de 185 días –más de seis meses– antes de la estancia, frente a los 157 días de antelación para aquellos que se alojan en julio. De esta forma, los clientes se pueden asegurar las vacaciones en el mes con mayor demanda con una mejor relación calidad-precio, han apuntado.
Las estancias más largas del año también se producen en agosto, con una media de 9,09 noches, frente a las 8,16 noches de julio, según han informado desde el portal a través de un comunicado remitido a Europa Press, apuntando que la ocupación de casas con piscina privada en total de julio y agosto en Málaga es de 72,06 por ciento, frente al 66,18 por ciento de la media de Andalucía.
Así, según pone de relieve el último informe de previsiones de Ruralidays.com, Málaga «es la provincia favorita de Andalucía para los europeos». Particularmente, predominan las reservas en la comarca de la Axarquía; y municipios como Alozaina, Alhaurín el Grande y Coín, de los que están en el interior; mientras que de los pueblos más cercanos a la costa, destacan Nerja, Frigiliana, Torrox y Cómpeta.
Entre todos los mercados, destaca el turista francés, pues suelen viajar en coche –el resto de europeos viaja a Andalucía en avión–, por lo que hacen estancias superiores a la media y con mayor número de ocupantes.
Precios
Por otro lado, dicho estudio también pone de relieve, han indicado, que los precios del turismo rural «han subido del orden de un siete por ciento en Málaga ante la próxima temporada de verano»; un aumento de tarifas que «se ha notado especialmente este año, después de que los precios se mantuvieran estancados durante los últimos ejercicios».
Así, el informe apunta a que los alojamientos alcanzan un promedio de 1.331 euros por estancia en agosto. El principal cliente es el que se considera un «viajero cosmopolita», esto es, «residente de ciudad, cada vez más exigente, que desea disponer de todas las comodidades que tiene en su casa, pero en un entorno rural y de naturaleza».
«El viajero cosmopolita desea vivir experiencias únicas, descubrir sensaciones nuevas, para después compartirlas con sus familiares y amigos a través de las redes sociales. Tiene un alto nivel de gasto y apuesta por la calidad», ha apuntado el director de Ruralidays.com, con sede en Málaga, Félix Zea.
En este punto, el informe de Ruralidays.com aclara que Málaga, frente al resto de Andalucía, «cuenta con alojamientos más adaptados a la demanda europea en cuanto al equipamiento que disponen». Son viajeros que desean «desconectar estando conectados», por lo que tener wifi es ya «algo imprescindible, algo que los propietarios han ido aceptando para adaptarse a la demanda europea».
En este sentido, en Málaga más del 85 por ciento de casas rurales ya cuentan con Internet, cuando en Andalucía esta proporción es del 71 por ciento de alojamientos.
Ruralidays.com pretende cerrar el año 2017 con una facturación de cuatro millones de euros, lo que supone un crecimiento de un 50 por ciento con respecto a 2016.
