La Costa del Sol trabaja en la especialización turística para dar respuesta a cada mercado. Uno de los segmentos que más fuerza está cobrando en el panorama turístico internacional es el relacionado con la salud y el bienestar, donde los clientes buscan vacaciones a medida. El perfil de ese turista de salud es mayor de 50 años y capacidad adquisitiva media-alta. De hecho, supera hasta en 10 veces el gasto del turista vacacional. Jacobo Florido, consejero delegado de Turismo y Planificación Costa del Sol, puso en valor la especialización del sector en el acto de entrega de la distinción TÜV Rheinland a la Clínica Santa Elena.
“Cualquier paso en ese sentido es fundamental para mantener nuestras posiciones de liderazgo. Este galardón es otro gran paso”, expresó Florido. TÜV Rheinland es un proveedor alemán a escala mundial de servicios técnicos, de seguridad y certificación. Con la acreditación del Sistema de Gestión integral según la norma de referencia UNE EN ISO 9001 y UNE 17003 certificado de calidad Sanitaria a la Clínica Santa Elena, la Costa del Sol da un nuevo paso en el desarrollo del segmento Health and Wellness. Durante el acto, el centro de salud ha firmado un acuerdo con la cadena MS Hoteles para el fomento del segmento.
La provincia de Málaga es un referente en el llamado turismo de salud, dado que cuenta con equipamientos de primer nivel. El alto nivel de hospitales y clínicas, con sus cualificados profesionales, de la que Santa Elena es un ejemplo, son una garantía de estabilidad para este segmento turístico. Pero además de clínicas y hospitales; también hay amplia oferta de spas, hoteles de lujos, balnearios modernos y también históricos como los de Tolox o Carratraca. En definitiva, decenas de posibilidades para desconectar. “Nosotros, como destino, seguimos trabajando en presentar una Costa del Sol a la medida de quienes buscan un espacio para cuidar la salud”, subrayó Florido.
El consejero delegado de Turismo y Planificación Costa del Sol valoró el inicio de los meses estivales. “Hemos arrancados con un horizonte de previsiones realmente alentador para esta temporada alta en la provincia de Málaga”, arguyó. Por primera vez, se espera superar los siete millones de turistas entre junio y septiembre, lo que supondría un incremento de un 5,2% respecto al mismo período del año anterior. Según las mismas previsiones, la Costa del Sol crecerá también en impacto económico, que en estos meses será de unos 7.300 millones de euros, un 8% más que en 2016. Jacobo Florido explicó que, en ese contexto, hay que poner el acento en la especialización del turismo. El cliente es cada vez más específico en sus demandas, lo que justifica la estrategia de segmentación que se realiza desde la Costa del Sol.