Cremas de verduras: calidez, sabor y salud en un plato

Las cremas de verduras son una de las formas más sencillas y elegantes de disfrutar lo mejor de la huerta. Reconfortantes en invierno, ligeras en verano, admiten infinitas combinaciones y permiten aprovechar ingredientes de temporada. Versátiles, saludables y llenas de sabor, estas preparaciones han dejado de ser simples entrantes para convertirse en protagonistas de cualquier mesa. Aquí proponemos cinco recetas fáciles de elaborar en casa, con instrucciones al detalle para triunfar en cada cucharada.

Crema de calabaza: dulzor reconfortante

Ingredientes (4 personas):

  • 1 kg de calabaza
  • 1 cebolla
  • 1 zanahoria
  • 1 patata mediana
  • 1 litro de caldo de verduras
  • Aceite de oliva, sal, pimienta y nuez moscada

Elaboración:

  1. Pelar y trocear la calabaza, la cebolla, la zanahoria y la patata.
  2. Sofreír la cebolla en una cazuela con un chorro de aceite hasta que quede transparente.
  3. Añadir la zanahoria, la calabaza y la patata. Rehogar unos minutos.
  4. Cubrir con caldo de verduras y cocinar 25 minutos a fuego medio.
  5. Triturar hasta obtener una textura suave. Rectificar de sal y añadir un toque de nuez moscada.

Servida con pipas de calabaza tostadas o un hilo de nata líquida, esta crema es sinónimo de confort casero.

Crema de puerros y patata: la tradición francesa

Inspirada en la clásica vichyssoise, esta crema se disfruta tanto caliente como fría.

Ingredientes:

  • 3 puerros (solo la parte blanca)
  • 2 patatas medianas
  • 1 litro de caldo de ave o verduras
  • 30 g de mantequilla
  • Sal, pimienta y un chorro de nata líquida

Elaboración:

  1. Lavar y cortar los puerros en rodajas.
  2. En una cazuela, derretir la mantequilla y pochar los puerros a fuego suave.
  3. Añadir las patatas peladas y cortadas en dados, cubrir con el caldo y cocer 20 minutos.
  4. Triturar hasta lograr una crema fina. Agregar la nata y ajustar de sal y pimienta.

Es una receta elegante, perfecta para una cena ligera o como entrante sofisticado.

Crema de setas: sabor intenso del bosque

Las setas aportan un gusto profundo y terroso, ideal para paladares que buscan matices diferentes.

Ingredientes:

  • 500 g de setas variadas (champiñones, portobello, shiitake)
  • 1 cebolla
  • 1 diente de ajo
  • 750 ml de caldo de pollo o verduras
  • 100 ml de nata líquida
  • Aceite de oliva, sal, pimienta y tomillo fresco

Elaboración:

  1. Limpiar y cortar las setas en láminas.
  2. Sofreír en aceite la cebolla picada y el ajo hasta dorar.
  3. Añadir las setas y rehogar 10 minutos, reservando unas pocas para decorar.
  4. Incorporar el caldo y cocer 15 minutos.
  5. Triturar hasta obtener una crema homogénea y añadir la nata.
  6. Servir caliente, decorada con las setas reservadas salteadas y una ramita de tomillo.

Un plato ideal para otoño e invierno, con una textura sedosa y un aroma irresistible.

Crema de zanahoria y jengibre: frescura y energía

Ingredientes:

  • 600 g de zanahorias
  • 1 cebolla
  • 1 trozo pequeño de jengibre fresco (2 cm)
  • 1 litro de caldo de verduras
  • Aceite de oliva, sal y pimienta

Elaboración:

  1. Pelar y cortar las zanahorias y la cebolla.
  2. Sofreír la cebolla en aceite y añadir las zanahorias.
  3. Incorporar el jengibre rallado y cubrir con el caldo.
  4. Cocinar 25 minutos y triturar hasta lograr una crema fina.

Ligera y con un punto exótico, resulta perfecta como entrante saludable o como plato detox tras un día festivo.

Crema de espinacas con queso: verde y cremosa

Ingredientes:

  • 400 g de espinacas frescas
  • 1 patata
  • 1 cebolla
  • 1 litro de caldo de verduras
  • 100 g de queso crema
  • Aceite, sal y nuez moscada

Elaboración:

  1. Sofreír la cebolla en una cazuela con aceite.
  2. Añadir la patata en dados y el caldo. Cocer 15 minutos.
  3. Incorporar las espinacas y cocinar 5 minutos más.
  4. Triturar junto con el queso crema hasta lograr una textura suave.

Su color intenso y su sabor delicado la convierten en una de las favoritas para toda la familia.

Una manera deliciosa de cuidar la salud

Las cremas de verduras combinan lo mejor de la cocina saludable con el placer de una textura reconfortante. Son platos fáciles de preparar, económicos y adaptables a cualquier temporada. Ya sea una crema clásica de calabaza, una sofisticada de setas o una fresca de zanahoria con jengibre, cada receta es una invitación a disfrutar del sabor de lo natural con cuchara en mano.

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