Cuatro pueblos malagueños para descubrir el encanto del turismo de interior

Málaga no es solo sol y playa; su interior esconde pueblos de ensueño donde la historia, la gastronomía y la naturaleza convergen para ofrecer experiencias inolvidables. Te invitamos a explorar cuatro de los más encantadores destinos para disfrutar de un turismo diferente y auténtico.


1. Ronda: Historia y panorámicas de ensueño

Famosa por su impresionante Tajo, Ronda se alza sobre un desfiladero que regala vistas espectaculares. Este pueblo es una joya para los amantes de la historia, con su Plaza de Toros, una de las más antiguas de España, y los Baños Árabes, que datan del siglo XIII.


Imprescindibles:

  • Pasear por el Puente Nuevo y admirar las vistas.
  • Visitar el Palacio de Mondragón y sumergirse en la historia local.
  • Degustar un vino de la Serranía de Ronda en alguna de sus bodegas.

2. Frigiliana: Pueblo blanco con encanto andalusí

Considerado uno de los pueblos más bonitos de España, Frigiliana es un laberinto de calles estrechas y empedradas con casas encaladas que reflejan el sol andaluz. Su herencia morisca se respira en cada rincón.


Imprescindibles:

  • Recorrer su casco antiguo y perderse en sus calles decoradas con macetas llenas de flores.
  • Descubrir el legado de la cultura árabe en el Museo Arqueológico.
  • Probar el famoso vino dulce de Frigiliana, elaborado con uvas moscatel.

3. Antequera: Corazón de Andalucía y patrimonio histórico

Conocida como el «Corazón de Andalucía» por su ubicación estratégica, Antequera sorprende con su impresionante patrimonio arquitectónico y natural. Desde los Dólmenes, declarados Patrimonio Mundial por la UNESCO, hasta la majestuosidad de la Peña de los Enamorados, este pueblo lo tiene todo.


Imprescindibles:

  • Visitar el Conjunto Arqueológico de los Dólmenes.
  • Explorar el Paraje Natural del Torcal, famoso por sus formaciones kársticas.
  • Saborear la porra antequerana, una delicia gastronómica local.

4. Gaucín: Mirador de la serranía

Situado en la Serranía de Ronda, Gaucín ofrece vistas espectaculares hacia el Mediterráneo y el norte de África en días despejados. Este pueblo, rodeado de naturaleza, es ideal para quienes buscan tranquilidad y conexión con el entorno.


Imprescindibles:

  • Visitar el Castillo del Águila y disfrutar de las vistas panorámicas.
  • Practicar senderismo en los alrededores para descubrir paisajes únicos.
  • Degustar productos locales como el queso de cabra y las mieles artesanas.

Estos cuatro pueblos representan el alma auténtica de Málaga. Ya sea por su patrimonio histórico, sus paisajes de ensueño o su deliciosa gastronomía, cada uno de ellos promete una experiencia inolvidable para quienes se aventuren más allá de la costa. ¿Listo para explorar?

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