El sector de la agroalimentación, una industria productiva en alza

agro

Si hay un sector con proyección en Andalucía, ese es, sin duda, el sector agroalimentario. Los productores de alimentos y bebidas se han enfrentado en los último años a retos muy importantes derivados de las exigencias del consumidor y los cambios en los hábitos de consumo en una sociedad donde el tiempo es escaso y, a pesar de las prisas, hay una intención de cuidar cuerpo y mente con la ayuda de una buena alimentación. La agroalimentación es un sector capaz de crear numerosos puestos de trabajo que mueve millones de euros anuales en facturación.

Para conocer la importancia de este sector, basta con saber algunas cifras al respecto. La agroalimentación supone en Andalucía el 8 por ciento del producto interior bruto, un dato que incrementa hasta el 13 por ciento si se tienen en cuenta las actividades asociadas a esta actividad. Además, emplea en la actualidad a 250.000 personas, lo que supone el 10 por ciento del empleo en la Comunidad Autónoma andaluza.

El último informe publicado por La Fundación Madeca en noviembre de 2015, pone de manifiesto la importancia de este sector también en la provincia de Málaga, donde las empresas agroalimentarias aumentaron un 11 por ciento con respecto al año anterior. Asimismo, crecieron las exportaciones de los productos agroalimentarios durante 2015, que ya en el mes de julio habían alcanzado un 74 por ciento de lo exportado durante 2014.

Condiciones climatológicas

Las condiciones climatológicas de Málaga y su orografía hacen que sea un territorio de gran diversidad gastronómica, donde cada una de sus cinco comarcas tiene su propia identidad. Aceite de oliva, subtropicales, pasas, chivo lechal malagueño, productos del mar, vinos, mieles, cabra malagueña, cerdo ibérico, licores, aceituna aloreña, quesos, mermeladas y conservas son algunos de los productos que conforman la gran despensa malagueña.

Alrededor de 40.000 familias viven del sector agroalimentario en la provincia. Para entender la trascendencia de lo que supone este sector para la economía malagueña, hay que destacar, por ejemplo, que Málaga cuenta con aproximadamente 13.000 hectáreas dedicadas al cultivo del aguacate y que el 70 por ciento de los aguacates que exporta España son procedentes de la comarca de la Axarquía.

Denominación de origen

Además, contamos con unas 2.000 hectáreas de cultivo que producen cuatro millones de toneladas anuales de pasas, un producto que tiene denominación de origen protegida y que se diferencia de otras del  mercado por el tamaño del grano, la pulpa y el sabor. Destaca también la cría de cabra malagueña, una raza autóctona española que se encuentra entre las razas más lecheras del mundo. El censo total de cabras malagueñas en España es aproximadamente de 300.000 cabezas, dándose su mayor concentración en la provincia de Málaga (200.000 animales). Cada año, producen 58 millones de litros de leche, más dulce y sabrosa que la de vaca y con la que se elaboran quesos de mucha calidad.

A la luz de estos datos, no es de extrañar que las entidades públicas se hayan puesto manos a la obra para ofrecer medidas que hagan a este sector más competitivo. Esa es la razón de ser de proyectos impulsados por la Diputación como Sabor a Málaga, que aúna a 300 empresas bajo la premisa de hacerlo crecer y fomentar el empleo sostenible. Ahora, los retos pasan por estructurar nuevas estrategias que lo hagan seguir creciendo y que le permitan innovar, ser más competitivo y tener una capacidad mayor para seguir creando empleo y riqueza.

Publicidad