¿Cuánto puede variar un ingrediente sin que pierda su sabor original? ¿Y una receta sin que pierda su esencia? La creatividad en la vida, como en la cocina, no siempre consiste en romper con lo establecido de forma radical. A veces basta una pequeña variación para conseguir algo totalmente nuevo: un nuevo aroma, un nuevo sabor, una nueva textura o color. A veces, un simple detalle convierte lo bueno en exquisito. A veces es cuestión de matices.
Esta es precisamente la filosofía que propone MATIZ, el nuevo restaurante que abre sus puertas en Málaga capital a principios de abril, con una propuesta única y diferenciada.
MATIZ nace como un espacio con alma, donde van a suceder cosas en torno a la gastronomía, pero también en torno al concepto de compartir, de degustar, de reencontrar y reencontrarse, de experimentar sensaciones que recordemos… Porque el equipo de MATIZ tiene claro que cada vez más el cliente busca micro-experiencias en la gastronomía y sólo ofreciéndolas cabe la posibilidad de convertirse un lugar de referencia y de encuentro en la ciudad. La decoración, la ambientación, el diseño de las cartas y sus ilustraciones y por supuesto, la creación de cada plato, han sido pensados y cuidados para transmitir emociones. Para crear la experiencia MATIZ.
Una cocina llena de «Matices»
La cocina de MATIZ ha sido concebida para ofrecer una experiencia más allá de la gastronomía, centrada en el producto de temporada y la materia prima, pero también en los ‘matices’ que suponen una impronta propia. De esta idea nace la propuesta gastronómica, donde el chef juega con las texturas, en los puntos de cocción, en la intensidad y en los tiempos de maduración.
El chef Marcos Granados ha sido el encargado de crear el universo de matices gastronómicos materializados en una cocina de base tradicional mediterránea reinventada, con un carácter fresco y actual. Una propuesta llena de detalles y giros sutiles, concebida como un juego constante en el que ingredientes, productos y técnicas llevarán a la cocina al punto en el que lo bueno se convierte en exquisito.
Entre las propuestas más autóctonas, la carta ofrece unos ‘Canelones de chivo malagueño, su jugo trufado y portobello a la parrilla’, el ‘Sashimi de salmonete con su aliño moruno’ o el ‘Taco de presa ibérica a las brasas, manzana osmotizada con anís, puré cremoso de naranja y zanahoria con trigo sarraceno’. “Vamos a hacer una cocina con muchos matices que la harán única en sabores, texturas y emplatados. Venir a Matiz va a ser una experiencia diferente en cada visita”, explica el chef.
En definitiva, un universo gastronómico donde la cocina tradicional se reinventa una y otra vez dando un paso más, convirtiendo esos ‘matices’ en auténticas experiencias culinarias.
Otros matices
MATIZ incorporará a su oferta un bar y servicio de coctelería, convirtiéndose así en un espacio polivalente abierto al público durante todo el día, incluyendo distintos ambientes y servicios, además del de restaurante. El que visite este nuevo local no sólo encontrará una gastronomía con un carácter muy personal y único; MATIZ se define también como lugar ideal donde tomar un desayuno, un aperitivo o un cóctel a media tarde.
Además, el restaurante ofrecerá una variada agenda mensual de actividades en torno a la gastronomía, los vinos y la coctelería. “La idea es crear un ambiente donde los clientes se sientan a gusto y puedan tener diversidad de opciones. Matiz va a ser un espacio en el que todo el que nos visite va a encontrar algo que le va a sorprender y a emocionar. Queremos que sea un lugar de encuentro único en Málaga”, asegura Myriam Ortiz, directora del restaurante.