Cada año las 1.200 ganaderías caprinas que hay en la provincia generan unos 120.000 chivos lechales. Estos ejemplares son muy valorados por la calidad de su carne, animales de un mes de vida con un peso de entre 8 y 10 kilos que proceden de explotaciones con unas características concretas de habitabilidad y que han nacido de ejemplares reconocidos de raza malagueña puras. Esto permite que se obtengan carnes muy tiernas y jugosas con un sabor suave y nutricionalmente ligera.
Todo ello forma parte de la reconocida y ya bastante reconocible marca de calidad ‘Chivo Lechal Malagueño’, un sello que empezó a funcionar en el año 2008 y que en los casi diez años que lleva en el mercado ha permitido alcanzar interesantes logros. Juan Manuel Micheo, secretario de la Asociación Española de Criadores de la Cabra Malagueña, señala que de un tiempo a esta parte se conoce y valora más al chivo lechal malagueño, “especialmente en el norte de España, en la zona de Cataluña”. En la provincia parece ser que su consumo también ha evolucionado bastante y su fama ha ido in crescendo.
El quid de la cuestión, nos desvela Micheo, está en que han sido no pocos los que se han sumado a esa marca sin servir realmente ejemplares acreditados como ‘Chivo Lechal Malagueño’. ¿Qué ha sucedido? “Todo el mundo ha empezado a hablar y a pedir chivo malagueño y eso se ha notado en las cifras de venta. Puede que en los últimos años se haya triplicado su consumo. Sin embargo, la carne de auténtico chivo lechal de Málaga apenas ha llegado a duplicar sus cifras”, señala Micheo. El problema está –continúa– en que “hay personas y/o empresas que se han lanzado a comercializar cualquier cabrito como si fuera el de nuestra marca de calidad, materia prima que en muchas ocasiones no procede ni de cabañas malagueñas”.
Al final esa situación desemboca en que se presenta como si lo fueran carnes de chivo malagueño que no son tal u hosteleros que se encuentran con que las cualidades de este no son las esperadas. La Asociación Española de Criadores de la Cabra Malagueña se está planteando cómo poner fin a esta confusión, si es que se le puede llamar así. “Nuestro debate interno pasa por si es conveniente dejar de hacer propaganda general y hacer publicidad y actos que den visibilidad al chivo lechal malagueño de calidad, con nuestro logo, que se vea bien la marca” y que se invite a los hosteleros a solicitar que se acredite que el producto que se adquiere es este y no una imitación.
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Fiesta de la Cabra Malagueña
Uno de los eventos que mejor les está funcionando en los últimos años es la Fiesta de la Cabra Malagueña, que entre el 23 y el 25 de este mes de septiembre celebrará su octava edición. Se enmarca dentro de las iniciativas que apuestan por acercar tanto el chivo lechal como los otros productos que genera el ganado ciprino en la provincia a la población en general. “Nos dimos cuenta de que la mayoría de actos que hacíamos se desarrollaban en entornos ganaderos así que decidimos apostar por hacer algo que dinamizara el comercio en torno a la cabra malagueña en la zona. Quesos, carne…”, recuerda Juanma Micheo. Y la apuesta salió bien sin duda, pues ya empieza a ser algo esperado tanto por los vecinos de Casabermeja, donde se celebra, como por personas venidas de todas partes de Málaga.
Estas jornadas se han ganado el favor de todo tipo de públicos, desde los más mayores, los adultos, a los niños. Se puede desde participar de un rato de pastoreo del ganado en el campo hasta acudir a un taller donde nos muestran cómo se elaboran los riquísimos quesos de cabra. Hay talleres, catas, zonas para comprar productos y degustar algunas de estas delicias. Podéis descargaros el programa haciendo clic aquí: 8ª Fiesta de la Cabra Malagueña.
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