Trabajando en una baja de impuestos para el golf La Marbella del futuro está aquí. Aquel que vea a la localidad marbellí todavía como un destino vacacional exclusivo para la ‘jet-set’ anda equivocado. El turismo evoluciona y Marbella también, a la par de su principal motor industrial. Primero fue la apuesta por el turismo del golf. En este sentido, los números son irrefutables al ser un sector que genera más de 900 millones de euros al año, según el Diario Sur, entre los ingresos directos y los no directos en toda la Costa del Sol. Ahora, las distintas federaciones han aunado fuerzas para presentar una propuesta al Ministerio de Hacienda, con la finalidad de obtener una regulación más favorable que les permita una bajada de impuestos y seguir explotando este recurso. Pese a los contratiempos en forma de IVA, Andalucía incrementó en un 10% el turismo del golf en 2017, aunque los datos microeconómicos dicen que no es suficiente para garantizar nuevos puestos de trabajo al ritmo esperado en los próximos años.
Atractivo turístico tras el verano
Cabe recordar que en la Costa del Sol aterrizan anualmente unos 500.000 visitantes con bolsos de golf entre el equipaje de la bodega, y gastan al día más de 100 euros tras la subida de 13 puntos el IVA en 2012, cuando el turista medio no llega a los 70 euros.
Ante los indicios de crisis, muchos clubes se vieron en la obligación de cerrar entre 2012 y 2014, y las autoridades locales tuvieron que encontrar alternativas sólidas. Así entraron en escenas nuevas vías de negocio turístico. Durante los últimos años, los hosteleros han experimentado un importante repunte en la ocupación tras el verano, es decir, en otoño y en invierno, estaciones en las que tradicionalmente Marbella y la Costa del Sol apenas obtenían ingresos. Las razones son varias, y una responde a eventos relacionados con el póker como el torneo CEP (Campeonato de España de Poker) en Marbella, que celebrará su penúltima parada del año del 23 al 27 de octubre de 2019. En 2018, la afluencia de turistas aumentó en un 2,8% en comparación con este mismo periodo en 2017 por todo lo que generó el juego a su alrededor.
Evidentemente, los movimientos en la caja no solo fueron fruto de la cita del CEP en Marbella, con otros torneos relacionados con las cartas moviendo también en la economía local. Sin ir más lejos, el PokerStars Festival, uno de los más importantes del Casino Marbella, generó unas 1.500 pernoctaciones en 2018, y hay que recordar que de promedio una habitación por noche vale 111,8 euros en Marbella. De hecho, solo Chiclana de la Frontera y Nerja cuentan con una estancia más cara en toda esta zona de Andalucía.
En esta abertura hacia nuevos mercados, la Costa del Sol y Marbella entendieron hace tiempo la importancia de promocionar también el turismo cultural y del lifestyle. La zona goza de mucho interés en este sentido gracias a un apellido sin fronteras como el de Picasso. Es más, da nombre al Museo Picasso de Málaga, uno que en 2018 tuvo 674.512 visitantes según cifras oficiales.
Destino para los equipos de fútbol
Aquí no acaba el catálogo de nuevos beneficios. Marbella ha inventado el turismo de las pretemporadas. Pionera en el turismo del golf, lo ha sido de igual manera en el de gol. A causa del frío invernal, muchos campeonatos de Europa y de Asia sufren un parón y los equipos acuden hasta instalaciones como las del Marbella Football Center para seguir trabajando durante este periodo bajo las cálidas temperaturas del litoral malagueño. Y no son conjuntos cualesquiera. El Borussia Dortmund, huésped fijo, es uno de ellos.
En pocas palabras, Marbella ha sido capaz de reinventarse turísticamente hablando. Sin renunciar a la ‘jet-set’, congrega ahora también otros turistas interesados por sus campos de golf, sus torneos de póker, su oferta cultural y sus instalaciones para la práctica del fútbol.