Tendencias 2021: la hoja de ruta de la gastronomía para este año

Delivery

El servicio de comida a domicilio o delivery siempre ha estado relacionado con el fast food. Hasta que llegó marzo de 2020, el confinamiento, los cierres, las restricciones de horarios y las reducciones de aforo. Fueron muchos los bares y restaurantes los que vieron en la venta para llevar o con entrega en casa una forma de salvar el negocio. Y los que quedan por llegar. Una tendencia a la que se han apuntado hasta los galácticos Michelin y en la que los locales que opten por envases reciclables y alternativas sostenibles ocuparán las mejores posiciones.

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Productos saludables y sostenibles

El referente más claro de la tendencia a consumir productos respetuosos con el medio ambiente lo encontramos en la nueva apuesta de la Guía Michelin, que incorpora en su última edición las ‘estrellas verdes’. Con este distintivo se pretende dar visibilidad a aquellos restaurantes que respetan los ritmos de la naturaleza y se esfuerzan por innovar con iniciativas más sostenibles.

El creciente interés por lo saludable queda reflejado en la apuesta por los alimentos plant-based, realizados con proteínas vegetales, en el incremento de las dietas vegetarianas y veganas sobre las carnívoras, y en la cocina de aprovechamiento para evitar el desperdicio alimentario.

Cocina de cercanía

La tienda de ultramarinos, el pequeño productor, el puesto del mercado y la venta a granel serán los protagonistas durante 2021. Y es que la pandemia nos ha reencontrado con el producto local y de cercanía en un intento de sacar adelante al comercio minorista. Los consumidores prestan más atención a lo que comen, al origen de los ingredientes y a su proceso de producción. 

Las nuevas tecnologías se convierten en el mejor aliado del tendero, el granjero y el agricultor para atender de manera directa a sus clientes y abastecerlos con productos frescos y de temporada. 

Home cooking

Las restricciones de movilidad imponen pasar más tiempo en el hogar. La oferta online de cursos de cocina y elaboraciones de recetas han convertido a los aficionados de los fogones en auténticos chefs de andar por casa.

El importante auge del home cooking no ha pasado ni mucho menos inadvertido para las cadenas de alimentación, que venden kits para llevar con ingredientes y elaboraciones para preparar platos concretos y más sofisticados. 

El chef en casa

La alta cocina ha sido una de las más golpeadas por la crisis del coronavirus. Los cierres, las limitaciones de aforo y la contención del gasto ha obligado a los grandes chefs a buscar alternativas para conectar con sus clientes. Al delivery y las clases online, se une el envío de elaboraciones envasadas al vacío con instrucciones precisas para darles el toque definitivo o el servicio del chef a domicilio, para disfrutar en el salón de casa con las creaciones de los maestros de los fogones.

Cocinas fantasmas

Se prevé que sea una de las tendencias más fuertes de 2021. Las cocinas fantasmas o dark kitchen son conceptos que hacen referencia a aquellos restaurantes que no poseen comedor y que únicamente se dedican a la venta por delivery o pick-up a través de servicios digitales como las apps o las webs. Un modelo de negocio en plena expansión al que también se han apuntado los grandes chefs.

Alimentación y bienestar

Es bien sabido que lo comemos tiene consecuencias directas en nuestra salud, pero también afecta a nuestro estado de ánimo. Si algo bueno ha traído la pandemia ha sido el cambio de prioridades en nuestra alimentación, con el fin de prevenir enfermedades y reforzar nuestro sistema inmunológico. Por eso en 2021 triunfarán los productos que beneficien a nuestro organismo.

A la cesta de la compra se incorporan alimentos como el aceite de copaiba, procedente del árbol Copaifera originario de la cuenca del Amazonas; las algarrobas, rica en fibras y con muchas propiedades curativas; los altramuces, sin gluten y ricos en proteínas vegetales y fibra; o la harina de garbanzo, rica en fibra y fuente de proteínas de origen vegetal. En este año aumentará el interés por suplementos herbales como la baya del saúco, la equinácea, el astrágalo, la cúrcuma y el jengibre; y por los probióticos como la kombucha, las microalgas, el miso o el kimchi, para promover un sistema digestivo saludable. 

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