Diego González Herrera es la tercera generación al frente del bar más emblemático de Alhaurín El Grande
Teniendo en cuenta todo lo que ha sucedido en el panorama gastronómico en los últimos tiempos, imaginar cómo una familia ha sabido escuchar a sus clientes y fidelizarlos generación tras generación nos llega al corazón.
Hoy Diego nos habla de este histórico lugar desvelándonos cómo han conseguido estar al pié del cañón durante tanto tiempo.
Por si algún lector de Agro Magazine no conoce este histórico lugar, ¿cómo definirías Casa sardina?
Casa Sardina se encuentra en el centro histórico de Alhaurín el grande desde hace 100 años. Somos la tercera generación al frente de este local rústico que visita todo tipo de público.
Servimos desde carne y pescado hasta menús y desayunos. Una oferta completa que se adapta a nuestro tan variado público.
¿Qué valor o significado histórico tiene Casa Sardina para Alhaurín el Grande?
Casa Sardina es ya un local emblemático en Alhaurín El Grande. En 100 años de historia da tiempo a que pasen muchas cosas.
Imagina que ahora vienen chavales de 25 o 30 años que llevan viniendo toda la vida con sus padres y abuelos. Ahora traen a sus parejas e hijos y para nosotros eso es un orgullo.
¿Cuál es el plato más popular?
Nuestra carta es cada vez más amplia, tenemos una oferta variadísima y cada cliente encuentra sus platos preferidos.
Me vienen a la mente las espinacas con langostinos, las gambas al pil pil con el huevo estrellado, nuestros champiñones indios o nuestro solomillo de ternera al PX…
En estos 100 años, ¿qué evolución habéis visto en la gastronomía?
La evolución en estos años ha sido enorme. Piensa que cuando empezamos, los clientes eran de tapita y vino. Punto. La oferta que esperaba el cliente era reducida, aquí no existía eso de la cocina fusión o internacional.
Incluso hoy por hoy, nuestros clientes saben a lo que vienen. Tenemos nuestra comida, la de siempre, ofrecemos buena calidad.
Hoy hay una enorme variedad de gastrobares y conceptos que eran impensables hace unos años. La gastronomía ha evolucionado muchísimo.
Ya no se ve las gastronomía antigua del magro con tomate, la ensaladilla rusa… lLa comida de olla, ya me entiendes. Ahora la tendencia son tapas y platos más elaborados, sabores más complejos.
¿Cuáles son las bases para lograr mantenerse durante 100 años?
El secreto es tener en mente que tienes entre manos algo que empezaron tus abuelos. Hay mucha historia detrás como para dejarlo. Es lo que nos ha tocado, hay que apechugar y tirar para adelante. La responsabilidad es grande.
Hay historias preciosas: tenemos un cliente de Liverpool que tiene un hijo en NY y otro en Australia. ¿Te quieres creer que los hijos llamaron por teléfono para hacernos una transferencia y dejarle la comida de cumpleaños invitada al padre?
Este tipo de cosas son las que al final te hacen seguir.