12 meses: muchos platos

cerezas

Un producto fresco marca la diferencia entre un gran plato y un resultado correcto. Aporta más sabor, aroma incluso mejor apariencia. El producto de proximidad, también llamado kilómetro 0, está ganando adeptos y la restauración malagueña es permeable a todos estos cambios. La provincia cuenta con una despensa lo suficientemente rica y variada para satisfacer cualquier exigencia. En estas líneas, queremos daros algunas sugerencias para que comáis productos frescos y de temporada durante todos los meses del año y disfrutar 2018 de una forma muy saludable.

Enero

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Comenzamos enero haciendo uso del verde. Es tiempo de alcachofas y guisantes. Ambos productos se prestan a buenas combinaciones con un jamón serrano de calidad, por ejemplo, el que proviene de los cerdos criados en el Valle del Genal a base de castañas y bellotas. Nadie puede resistirse. Tampoco están nada mal en tortilla o, incluso, confitadas en el caso de las alcachofa

Febrero

Las mandarinas y las naranjas vienen a alegrarnos el paladar. En el Valle del Guadalhorce tenemos una gran variedad de cítricos que hacen las delicias de mayores y pequeños. Flanes, rosquillos o mousses pueden ser elaboraciones perfectas para usar estas frutas, al igual que las salsas para acompañar carnes o pescados.

Marzo

La antesala de la primavera. Las temperaturas remontan, los cielos se despejan y las tardes se alargan. Es el momento de los calabacines, verdaderos reyes de la primavera. Un plato sencillo y muy recomendable son los libritos de calabacín, sólo hay que disponer varias lonchas finas pasadas por la plancha con otras tantas de jamón cocido y queso a modo del milhojas. Sano y sabroso.

Abril

Pasamos al mes de abril, con la primavera pisando fuerte, y la huerta más verde que nunca. Entre otras verduras, elegimos la coliflor y una receta muy antigua: la sopa de coliflor con Almejas. Su origen se atribuye a los pescadores de la costa, aunque su uso se ha ido perdiendo un poco.

Mayo

Sabemos que mayo está aquí por la profusión de flores y colores. Una naturaleza impresionista tachonada de tonos vivos. Comienzan a recogerse las primeras cerezas, en Alfarnate tenemos de las mejores. Podemos usarlas tanto en cocina como en repostería, y qué mejor que un rico gazpacho de cerezas. Si viajamos hasta Periana y Sayalonga encontraremos melocotones y nísperos, con los que podemos elaborar postres y salsas de acompañamiento.

Junio

El verano empieza a vislumbrar con las temperaturas en ascenso y la necesidad de platos frescos y sencillos. Es el mes de las brevas, un interesante alimento a medio camino entre el fruto y la flor. Si tenemos cerca una higuera bífera, somos afortunados, pues nos dará nueva cosecha de higos a partir de septiembre. Tanto con unas como con otros, tenemos el postre resuelto, y un buen plato si elegimos un secreto ibérico al que acompañar con estas deliciosas frutas, también.

Julio-Agosto

Julio llega, entre las primeras canículas de la temporada. Empezamos a saborear los mangos de la temporada, que estarán en su momento óptimo llegado agosto. Los agricultores de la Axarquía se afanan para obtener los mejores ejemplares, que se exportan a Europa del Norte. Es una fruta versátil que permite usos en la cocina, la repostería e, incluso, la coctelería. Queda bien en los tartares, en las salsas para carnes y en cualquier elaboración dulce. Como decían los hindúes, la fruta del amor.

Septiembre

Es tiempo de vendimia y, qué mejor producto que un racimo de uvas moscatel para cerrar una sobremesa. Como preludio de los sabores de otoño, encontramos los primeros boniatos y buenas calabazas. Es tiempo de empezar a preparar ricas cremas de verduras con productos frescos. La mesa se pasa al naranja y tanto una como otra son un acompañamiento estupendo asadas al horno.

Octubre

Llegamos al mes de octubre, a uon de los últimos meses del año. Las protagonistas serán las setas que reaparecen con las primeras lluvias. Si queremos degustarlas bien frescas, las setas a la plancha son la mejor opción. Verdaderamente sencillas con ajo, sal y perejil, y también sabrosas, aunque no debemos desechar los revueltos ni los guisos para estas delicias.

Noviembre-diciembre

Y para encarar el invierno en noviembre, nos topamos con las berenjenas en los puestos de verdura. Echando mano del recetario popular malagueño nada mejor que unas berenjenas fritas con miel de caña. A la parrilla o en el horno rellenas de carne también son opciones a tener muy en cuenta para sacarles todo el sabor. No podemos olvidarnos tampoco de las castañas y el membrillo. Para terminar el año, hagámoslo con el color del pomelo para hincarle el diente a diciembre o con el sabor de unas buenas chirimoyas del lado más tropical de nuestras costas…

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Juan Alberto Gómez
Redactor todoterreno con más de 15 años de experiencia, en el mundo de la gastronomía, el turismo y la economía. Explorador incansable de los sabores, las cocinas del mundo y los nuevos hallazgos culinarios. Siente pasión por todo lo que rodea al mundo del vino y la enología. También de los productos de temporada y kilómetro 0, lo que viene en denominarse ‘slow food’. Hace suyas unas palabras de Cicerón: “el placer de los banquetes debe medirse no por la abundancia de los manjares, sino por la reunión de los amigos y por su conversación”.