No hay duda que Málaga es conocida por su uva moscatel, por sus vinos y sus pasas, probablemente, la mejor moscatel del mundo, es una opinión personal después de poder catar muchas y muy diferentes variedades de esta misma uva.
La que no es tan conocida es la Pedro Ximénez, Pedro Ximen o Pero Ximen. Nuestros vecinos de Montilla-Moriles han sabido aprovechar su clima y terreno para hacer de la PX su mayor tesoro, tanto en seco, con sus finos, como en dulce, con los denominados popularmente PX.
Pero en Málaga también se está rescatando esta uva, que parecían algo olvidada y que resurge como históricamente ya lo hizo en otra época.
No está muy claro la procedencia de esta uva, según algunos la pudo traer un soldado alemán de los tercios, aunque el origen podría estar en las islas de Madeira o Canarias. Lo que si parece estar claro es que llegó primero a Málaga y después se extendió a Montilla y Jerez.
Otra de las teorías es la procedencia árabe de dicha uva y la castellanización de su nombre original Pero Ximen.
Exquisitos aromas
Es una uva de exquisitos aromas, alto contenido en azúcares, puede vinificarse en seco o dulce, fina piel y tamaño medio del grano.
Pero volviendo al presente, la uva PX ya hace tiempo que está representada en menor medida en la provincia de Málaga en las zonas Norte, Montes y Axarquía. Sin duda la situada en Mollina y alrededores son las más proliferas, por su cercanía a la vecina provincia de Córdoba. En ella podemos degustar un “fino” con crianza biológica de la Bodega Cortijo La Fuente.
Pero no solo se elabora Pedro Ximenez al estilo tradicional. Este año pasado salía al mercado un vino que ha causado sensación; La Ola del Melillero, de Victoria Ordoñez, una mezcla de Moscatel y PX vinificadas en seco con un toque de madera y una presentación muy atractiva en su etiqueta.
Victoria ha querido recuperar esa PX de Montes de Málaga con un vino denominado Montain Wine, al igual que aquellos que se hacían hasta el Siglo XIX y que hicieron famoso el nombre de Málaga. Su aportación es Voladeros y es un auténtico Montain Wine de la época con no más de 14º Alc.
Por otro lado se encuentra el proyecto de dos grandes elaboradores de vino de la provincia como son Vicente Inat (Descalzos Viejos y Lunares) y Juan Muñoz (Dimobe) que han unido su conocimiento para adentrarse en sus “Viñedos Verticales”.
Filitas y Lutitas es la creación de un vino con un 90 por ciento moscatel y 10 por ciento Pedro Ximenez, fermentado en barricas y criado durante 10 meses en antiguas botas de brandy.
Es ell esfuerzo realizado por todas estas personas y otras más que probablemente estén haciendo que esta uva, anteriormente reconocida en Málaga, y que tras la plaga de la filoxera, prácticamente despareciera, tenga una nueva era y resurja de entre los libros de historia.