El restaurante La Plata – Casa Matilde se encuentra a orillas del Mediterráneo, en la localidad de Benajarafe. Es un establecimiento familiar que nació hace 40 años y que ha sabido adaptarse a los tiempos sin perder esa esencia de lo casero y hecho con cariño. Precisamente, eso es lo que la familia Gálvez Montosa quiere transmitir a sus clientes nada más abrir la carta: “nos esmeramos en la buena cocina”. Es justo en ese momento cuando las expectativas, que son muy buenas, suben varios peldaños… Y el resultado no defrauda, sino todo lo contrario, antes de acabar ya sabes que vas a volver.
Al frente de la cocina se encuentran la madre, Matilde Montosa, y la hermana, Rocío Gálvez, las manos experimentadas de la primera y la formación académica de la segunda hacen el tándem perfecto para que tradición e innovación se den la mano de una forma equilibrada y perfecta donde se encuentran los productos de cercanía, la calidad, el sabor y la técnica. Matilde se maneja como nadie en los platos de cuchara, mientras que Rocío, formada en La Cónsula, aporta esa apertura hacia las nuevas fórmulas culinarias actuales. Marcos, el hermano de Rocío, es quien maneja la sala y es la tercera arista de este triángulo profesional que ha puesto a La Plata entre las referencias culinaria de la provincia.
La carta es muy variada. Desde pescados y carnes hasta ensaladas, arroces y las sugerencias de la casa. En este último apartado vamos a encontrar un plato muy fresco para los meses de verano, aunque se puede tomar en cualquier época del año. Se trata del timbal de salmón ahumado relleno de tartar de aguacate, que son de cosecha propia, todo hay que decirlo… ¡Y como se nota!
Otro de sus clásicos es, sin duda, el arroz caldoso con carabineros, acompañado sólo de marisco, y tan demandado por los clientes que ha acabado por convertirse en una de las especialidades de la casa. Para nosotros uno de los imprescindibles de esta casa, al igual que el chivo lechal malagueño al ajillo, que estando en la zona de la Axarquía no puede faltar en la mesa de cualquier restaurante que apueste por el producto local. Este es un guiso que permanece en carta todo el año también, ya que se ha convertido en uno de los preferidos por quienes frecuentan el restaurante.
Además de todo esto, hay opciones para todos los gustos como la lubina a la espalda o la fritura tradicional de pescaíto frito, las carnes a la parrilla o el rabo de toro. Mención especial merecen también los postres. Todos caseros, algunos más tradicionales como sus natillas o el flan de huevo y otros más actuales como la tarta de chocolate blanco y frambuesa o el coulant de chocolate con helado de vainilla, uno de esos postres que en pocos sitios sirven acertadamente, pero que aquí es de los de verdad, con el corazón rebosante de chocolate caliente, hecho con tiempo y servido con cariño.
En su carta de vinos tienen medio centenar de referencias, donde también hay presencia de la DO Sierras de Málaga con Lagar de Cabrera, Monte Faco, Botani y Cortijo Los Aguilares.
Además de esta estupenda propuesta gastronómica, La Plata – Casa Matilde dispone de varios salones con aire acondicionado, una terraza frente al mar, zona de hamacas y aparcamiento gratuito. Todas las comodidades para pasar un día de esos que entran ganas de repetir, porque si algo os vais a llevar de este restaurante es buena comida, un trato muy profesional y mucha calidad. Buen provecho.