El delegado del Gobierno andaluz en Málaga, José Luis Ruiz Espejo, destacó hoy la aportación del sector vitivinícola a la generación de empleo y riqueza en el interior de la comunidad y subrayó además su contribución al turismo, como foco de atracción y como elemento diferenciador del destino.
Ruiz Espejo asistió a la presentación de la Feria de la Vendimia de Mollina, encuentro que la localidad malagueña celebrará del 8 al 10 de septiembre y que prevé reunir a cerca de 8.000 visitantes interesados en los vinos de la Denominación de Origen Málaga y Sierras de Málaga.
En este sentido, consideró que «una actividad, como la vid y su recolección y transformación, se convierte en un referente no solo económico y social en un municipio como Mollina, sino también en un atractivo turístico», una interrelación que «hace de la provincia un destino característico y singular».
Recordó que Mollina produce alrededor del 80% de los vinos con denominación de origen Málaga, productos que centrarán las actividades programadas durante este evento, declarado Fiesta de Interés Turístico y que cuenta con el apoyo de la Consejería de Turismo y Deporte.
Por su parte, el consejero delegado de la Empresa Pública para la gestión del Turismo y del Deporte de Andalucía, Cristóbal Fernández, señaló que la gastronomía «no es ajena a ningún segmento, porque el viajero, sea cual sea su motivación, cada vez está más interesado por disfrutar de la restauración y por conocer la cocina y los productos locales».
Fernández apuntó igualmente que, junto a un acontecimiento turístico que «fortalece el atractivo del interior y genera flujos de viajeros con el litoral», es también un atractivo cultural, «ya que esta fiesta ha sido pregonada por grandes maestros de las letras, como Rafael Alberti, Antonio Gala, Fernando Quiñones, Rosa Regás, entre otros».
Pregón de Ángel Idígoras
El alcalde de Mollina, Eugenio Sevillano, adelantó que en la edición de esta año el pregón correrá a cargo del humorista gráfico Ángel Idígoras y confió en que este acontecimiento sea de nuevo un éxito y alcance una elevada afluencia de público en esta edición.
El origen de la Feria de la Vendimia data de los años 70, si bien es a partir de 1987 cuando comienza a tomar un mayor auge su celebración y a ser conocida popularmente con su denominación actual, celebrándose anualmente el segundo fin de semana del mes de septiembre.
El programa de esta cita cuenta con diversas actividades culturales, como un certamen poético y una noche flamenca, animación callejera y una exhibición ecuestre; además de talleres y catas relacionadas con los vinos de la localidad y su proceso de producción.
